DESTETE EN EL EMBARAZO

destete embarazo itmum

Pues sí, una cuestión que a muchas se nos plantea. No es obligatorio si no hay una razón médica que lo aconseje, pero a veces la necesidad manda. 

Mi primera idea fue mantener la lactancia mientras él quisiera, sobre todo cuando ya sólo demandaba por la noche para dormir y en alguna ocasión esporádica, pero como siempre con esto dela maternidad, no es lo que nosotras imaginemos o queramos, sino lo que ellos vayan demandando y marcando. Os cuento mi experiencia.

Como os contaba en este post, lactancia materna y embarazo no son incompatibles mientras no exista razón médica que así lo aconseje. 

Son muchos los mitos que rodean a este tema: la lactancia puede producir contracciones de parto, si le bebé mayor lacta el embarazo no llegará a buen término e incluso el gran mito: mientras des el pecho no te puedes quedar embarazada.

También se decía que a mitad de embarazo muchos bebés se destetaban de manera natural porque la leche cambiaba de sabor, pero lo cierto y los últimos estudios indican que la producción de leche, a mitad de embarazo más o menos, se reduce e incluso llega a desaparecer para que los pechos se "reseteen" y produzcan el calostro ante la inminente llegada del bebé pequeño.

Pues bien, visto lo visto, nosotros continuamos con la lactancia hasta los 2-3 meses de embarazo, cuando mi sensibilidad mamaria fue a mayores. No a todas las mujeres les pasa, pero a mí sí, en los dos embarazos, con la única diferencia que en este era una mamá lactante.

Llegó un punto que me daba pavor que se fuera a enganchar pero tampoco quería forzarme hasta el límite de comenzar a generar rechazo o agitación por amamantamiento, así que, tras varios días dándole vueltas y temiendo el momento "fin lactancia", opté por lo más fácil: hablar con mi bebé mayor de apenas 20 meses.

"No lo va a entender", "va a pensar que ya no le quiero", "se va terminar nuestro vínculo".... mil cosas pasaban por mi mente y me aturrullaban y sin razón. Una noche, cuando nos metimos en la cama le dije que mamá tenía pupa, que me dolía mucho, que la tetita tenía pupa.. Me dio un beso, se acurrucó en el pecho y ahí se quedó dormido sin engancharse.

¿Así de fácil? NO. Para ir avanzando en esto de la llegada del bebé y el destete, decidimos que era momento de pasarle a su cuarto pero para que no fuera tan drástico el cambio, dormiría con su padre. Dos noches fueron las que se despertó reclamándome, pero no más. Dos noches que para mí fueron muy duras (bastante más que para él seguramente) pero que el papi supo gestionar: no nos podemos echar atrás ahora porque le volvemos loco. 

¿Resultado?  Un destete sin lágrimas. Alguna vez que me pidió le ofrecí otra cosa, le recordé que mamá tenía pupa y lo entendió a la perfección.

Es cierto que no siempre el destete va a ser tan fácil pero creo que también es importante compartir historias fáciles y de éxito en este sentido, porque yo de leer dramas me puse la venda antes de tiempo y no confié en mi bebé. Pensé que iban a ser días y noches largas de lloros, de recaídas, de berrinches, y no fue así.

Lo principal creo que es mantener una actitud firme y si hemos tomado la decisión de llegar al fin de la lactancia, sea cual sea nuestro motivo, es hacerlo y buscar los remedios/trucos/cuentos/recompensas que mejor nos funcionen y que más fácil hagan este proceso para todos, no sólo la mamá y el bebé sino también para el papá y hermanos si los hay.

Un trabajo en equipo como suelo decir :)

Espero que os ilumine un poco este relato si estáis en proceso. Os dejo también este post de ALBA, la asociación de lactancia materna de Alba Padró, que es la que me ha acompañado en este proceso y de la que también os recomiendo su libro. 

Si necesitáis algo, ya sabéis dónde localizarme! Un beso!

Comentarios

Entradas populares